El Eiger, conocido como “El Ogro”, es una de las montañas más míticas de los Alpes y del mundo. Famosa por su cara norte, ha sido escenario de historias trágicas y grandes hazañas alpinas.
La ascensión por la arista Mittellegi, en su cara este, ofrece una experiencia única: menos técnica que la cara norte, pero igualmente espectacular. Esta ruta es la más utilizada para alcanzar la cima del Eiger, aunque sigue siendo un desafío exigente.
La cresta es aérea y afilada, con pasos mixtos de roca y nieve. Aquí, el vértigo y la adrenalina se mezclan con las impresionantes vistas de la cara norte. Desde el refugio Mittellegi hasta la cima, superaremos 600 metros de desnivel, con pasos de hasta grado IV, además de tramos equipados con maromas en las zonas más verticales.
El descenso por la arista oeste hasta el refugio Mönchsjochhütte es una bajada larga y técnica, con destrepes y rápeles. Si la jornada avanza según lo previsto, descenderemos a Grindelwald en tren. En caso contrario, pernoctaremos en el refugio Mönchsjochhütte y completaremos el regreso al día siguiente.
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La salida será temprano desde Chamonix, o nos encontraremos directamente en Grindelwald. Desde allí, tomaremos el tren Jungfraujoch Bahn hasta la estación de Eismeer.
Un túnel excavado en la roca nos llevará hasta el glaciar Eismeer, que cruzaremos hasta alcanzar la base de la cresta. Aquí, afrontaremos una escalada de hasta IVº para llegar al refugio Mittellegi.
Después de 2-3 horas de ascenso, alcanzaremos el refugio Mittellegihütte, ubicado estratégicamente sobre la arista.
La jornada comenzará a las 5:00 h, iniciando la escalada en la arista. La primera sección es más horizontal, pero rápidamente gana verticalidad, alternando escalada en roca con tramos equipados con maromas.
El recorrido combina zonas de roca y nieve, con pasos que ofrecen un ambiente alpino espectacular. Tras 4-5 horas de ascenso, alcanzaremos la cima del Eiger, desde donde disfrutaremos de vistas impresionantes.
El descenso se realiza por la arista sur, superando destrepes y rápeles hasta el collado Nördliches Eigerjoch (3.606 m). Desde aquí, seguiremos una arista hasta el refugio Mönchsjochhütte (3.650 m). Una última caminata nos llevará a la estación de Jungfraujoch, desde donde regresaremos a Grindelwald en tren.
